sábado, 1 de junio de 2013

EPIC 5, first day


Epic 5, a great journey


¡Hola a todos!

Primero que todo quiero agradecerles infinitamente por darse el tiempo de leer esto. Si de una u otra forma algún aspecto de mi historia y/o experiencia pudiera serles de utilidad, por favor no duden en contactarme, estaré contento de poder compartirlo.

Ya ha pasado algún tiempo desde mi última entrada y es que este último tiempo ha sido un tiempo de mucha reflexión, de buscar bien definir mis motivaciones y mis nuevos desafíos, además las condiciones me dieron una hermosa oportunidad de practicar la paciencia y de aprender mucho respecto a lo importante que es la recuperación. 

Como muchos de ustedes saben, el año pasado gracias a vuestro apoyo, pudimos cumplir el sueño de ir a Hawaii y correr un gran desafío, el EPIC5, junto a grades atletas y ahora grandes amigos, Pep Sánchez, Carlos Llanos, Michael Flartey, Jason P. Lester, Alika Hoomana, Colin Cross, Chris Holzner, Diana Trevino, Jen McVeay, Kelly Lewi, Lisa Kaili Ledesma, Rebecca Morgan, Kawika Carlson. Sé que olvido algunos nombres y pido mis sinceras disculpas por ello. En general soy de retener más imágenes que nombres y aunque vuestro nombre no aparezca en la lista, tengo los más lindos recuerdos e imágenes del tiempo que compartimos juntos. 

Kaua'i, día 1, antes de comenzar, ¡felices!

Antes de contarles los detalles, me gustaría agradecer profundamente a cada uno de ustedes por ser parte de esto y de manera especial a quienes desde hace algún tiempo han sido parte fundamental del equipo, gracias a Susana Soto (mi madre), y a Reinaldo Hermann, sin ellos nada de lo hecho en lo deportivo sería posible, son realmente ellos quienes se llevan la parte más dura del desafío y siempre tienen una sonrisa para compartir conmigo y con los otros equipos, ¡realmente son los mejores!

Junto al mejor equipo, Susana y Reinaldo


Llegamos a Hawaii un día antes de lo previsto, y es que con la diferencia de hora, la duración del vuelo y el hecho de haber reservado con mucha anticipación y en momentos diferentes algunas cosas, cometí el error de reservar auto y hotel para el día posterior a nuestra llegada. Primera dificultad que gracias a la buena voluntad de la gente en Hawaii pudimos resolver sin problemas y es que desde antes de subir al avión que nos llevaría a nuestro destino final en Kauai ya se respiraba en el ambiente el espíritu de Aloha, el hacer todo "con amor" y el compromiso de los habitantes d ela isla por compartir ese espíritu, esa disposición con el mundo. Kauai es un lugar maravilloso, en ella se han filmado escenas para distintas películas por ejemplo Jurasic Park, y es que la vegetación crece de manera natural, con toda su fuerza y en armonía con la gente de la isla. Para mí, fue amor a primera vista, y si debo ser sincero, mi corazón espera tener la oportunidad de volver algún día. Los hoteles, a muy buen precio, tienen instalaciones maravillosas. Todo muy bien diseñado, con todas las comodidades necesarias. Quedamos muy bien ubicados frente a un gran supermercado que permanecía abierto las 24 horas y que además tenía la fruta más maravillosa que alguna vez haya comido. Las piñas son realmente diferentes a todo lo que había probado antes razón por la cual con el correr de los días, se volvieron una de mis principales fuentes de nutrientes. 

Al día siguiente, luego de correr un poco con mi madre y Reinaldo, llegó la hora de nadar y disfrutar de la playa. Jen (quien participa de manera voluntaria en la organización), pasó a buscarnos y luego de regalarnos collares de flores y semillas, de compartir risas y experiencias, partimos con ella, ese día nos quedaríamos en una de las casas conseguidas por el comité organizador, la carrera estaba pronta a comenzar y ya se empezaba a sentir el ambiente. Ella fue una de las personas fundamentales en todo el proceso de preparación, sin ella no me hubiese sido posible comprar pasajes, reservar autos, hoteles, etc.  Paseamos por la isla, es muy lindo el ir conociendo a las personas y tener la impresión de que has compartido toda una vida con ellas. 

Tres grandes amigos, Jen, Jason y Colin

Los días comenzaban a avanzar y empezaban a llegar los demás aventureros con quienes compartiríamos la ruta. Me sentía y me siento tremendamente afortunado de haber podido compartir con ellos. De escuchar sus historias y experiencias, de aprender lo más posible de cada una de las palabras que escuchaba. Un niño en tierra de gigantes, aprovechando de empaparse con toda la experiencia y motivación que emanaba de cada uno de los verdaderos "monstruos de la ultradistancia" con lo que pude compartir. 

Colin y Chris daban lo mejor de ellos para tener nuestras bicicletas en las mejores condiciones, y eso día a día. Nunca había visto un tal dominio de la mecánica de la bicicleta, realmente manejando completamente cada detalle, dos verdaderos artistas que compartían su arte con nosotros después y antes de cada nuevo desafío. 

La charla técnica comenzó y afortunadamente el poco inglés que manejo fue suficiente como para realizar una traducción aproximada al español. Cada uno motivó a los demás con algunas palabras, recibimos los kits y pudimos conocernos mejor. Todo comenzaría al día siguiente, un primer IRONMAN bastante poco convencional ya que comenzaríamos por la maratón realmente muy temprano. Temprano a dormir, al menos en intención y es que en eventos como este y teniendo que dejar todo listo la noche anterior, difícilmente se logra dormir suficiente. 

Día 1: Kauai

Día 1, antes de empezar

En pie desde muy temprano, la aventura comenzaba. Carrera a pie, natación, ciclismo, todo terminando directamente en el aeropuerto para alcanzar a tomar el avión que nos llevaría a la isla siguiente. Llegando al punto de partida, primer problema, el GPS no funcionaba. Nada grave pero sabía que corría el riesgo de comenzar demasiado rápido. En estos eventos de varios días, lo principal es gestionar de la mejor manera posible la intensidad y partir demasiado rápido demasiado pronto, puede jugar una mala pasada después. Todo estaba listo, se respiraba Aloha en el ambiente, todo el nerviosismo y ganas de comenzar. Era de noche. Muchas gracias a NATURALSHINE por su confianza, por lejos el mejor sistema de iluminación que jamás haya visto, tremendamente cómo e increíblemente potente. Partimos y desde el principio tuve muy buenas sensaciones. Simplemente disfruté de correr. Susana y Reinaldo compartían conmigo jugosas piñas y papayas, lo que sumado al agua de coco, eran más que suficientes para mantenerme corriendo a buen ritmo, con una sonrisa y al mismo tiempo lleno de energía. Primera maratón en 3h02min, rápida transición a la natación y buenas sensaciones en el agua. El poco viento que había ese día, tuvo como consecuencia que la bandera ubicada en la orilla para marcar el punto de giro no flameara y como era de esperar, nadé bastantes metros de más. La natación es una buena manera de "soltar" las piernas, así que viendo el lado positivo de las cosas, salí del agua preparado ya para afrontar los 180k de bicicleta. Terreno duro, bastante viento y un semáforo que me tuvo parado por más de quince minutos. Nada de eso parecía importar, el paisaje es maravilloso e invita a sonreír a disfrutar de cara giro de pedal. Cada vez que mi mente empieza a pensar en el cansancio, en el viento, en lo duro del terreno, mi madre está ahí para gritar "dale Sobi, tú puedes" y basta con eso como para que una sonrisa se dibuje en mi cara y todo vuelva a ser sólo felicidad y deleite. Encontramos a varios atletas durante el circuito de bici y los gritos de apoyo volaban de un lado al otro del camino. Terminamos en el aeropuerto como previsto, 10h40min para el primer IRONMAN, quizás algo más rápido de lo previsto y con Jen que repetía una y otra vez, "stupid Sebastian", pensando en que el no habernos contenido un poco más el primer día sin duda podría tener consecuencias los días posteriores.

Cambio de pasajes y rápido vuelo, algunas horas antes de lo previsto, a la segunda Isla Oahu, agradeciendo el tiempo ganado que nos permitiría sin duda descansar y preparar todo para nuestro segundo IRONMAN.

Equipo en acción

No hay comentarios:

Publicar un comentario